dic 172007
 

Muchos empresarios se dirigen a mí estos días para preguntarme si hay crisis y qué va a pasar en el 2008. Entiendo que suponen que mi perspectiva de diferentes sectores me proporciona una mejor visión de la jugada.

Creo que ninguno de estos empresarios esperan que les responda con lo que pueden leer en la sección de economía de tantas revistas o diarios estos días. Sin duda, podríamos hablar de cómo nos dicen que está la macroeconomía y de las previsiones de crecimiento con la incidencia de la parada en el sector de la construcción, etc.

Ahora bien, yo propongo a estos empresarios que miren más a sus sectores, a sus clientes, a sus ofertas y a su empresa. Sin duda, nos encontramos muchos sectores con un elevado nivel de competencia —lo que ha comportado crecimiento o no—, pero en muchos casos con menores cotas de beneficios.

En muchas de estas situaciones observo sectores maduros. Pero lo que más me preocupa es que también encuentro lo que yo denomino EMPRESAS MADURAS; es decir, empresas que creen que lo que les pasa es por CULPA de la situación en el sector o en la macroeconomía y que no saben reaccionar en el momento oportuno para dar un paso al frente y establecer acciones para afrontar la situación. No os digo que sea fácil, pero sí que es indispensable pararse, reflexionar y planificar cómo podemos cambiar el rumbo de nuestras empresas para sobrevivir a medio y largo plazo.

Por lo tanto, me gustaría empezar el año 2008 siendo capaces de reflexionar si nuestra empresa está MADURA y si debemos darle un nuevo impulso.

¡Felices fiestas a todos de parte de todo el equipo humano de AICON!

José María Llauger
Gerente y director técnico de Aicon Consultores de Gestión, S.L.
15/12/2007

nov 202007
 

Es posible que en muchos sectores hoy nos encontremos en un cambio de ciclo. Es evidente que nuestro entorno económico se ve envuelto de nubarrones; como siempre, en función del sector, éstos son más negros o incluso el cielo está despejado.

Repasando charlas que he tenido con empresarios y directivos, últimamente veo que muchas empresas están necesitadas de ACCIÓN. El mundo se mueve pero parece que en ocasiones muchas empresas no lo hagan. Me refiero evidentemente a una acción decidida hacia un futuro, porque en todas las empresas sin duda existe acción, pero quizás demasiada acción enfocada únicamente al día a día. Lo que reflexiono es que faltan pasos decididos hacia delante y sobran vueltas entorno a lo mismo.

Sin duda dar un paso adelante presenta dudas, miedos, pues puede suponer salir de lo que es nuestro espacio natural. No es fácil. Muchas veces simplemente asomamos la cabeza y no nos convence lo que vemos, volvemos al día a día; salir de ahí es meternos en un mundo de riesgo, aventuras, retos, etc. Nos gusta más el confort del día a día.

¿Pero el mundo se mueve? ¿Las cosas cambian en nuestros sectores? Parece que sí. Entonces, ¿nos podemos permitir el lujo de no movernos? Evidentemente mi respuesta es no. Os sugiero que hagáis que vuestra empresa se mueva; tirad de ella.

José María Llauger
Gerente y director técnico de Aicon Consultores de Gestión, S.L.
20/11/2007

oct 252007
 

Muy buena frase, ¿no creéis? No es mía, lástima; cuelga en el despacho de  Barry Beracha, CEO de Sara Lee Bakery Group. Con esta frase intenta hacer reflexionar a sus subordinados, antes de que entren en su despacho y hagan uso de su tiempo, de si tienen suficientemente analizado el tema que le van a exponer o proponer.

Alguien puede pensar que en la PYME esta frase no es de aplicación porque si tuviéramos que analizar las cosas, perderíamos demasiado tiempo. Pero ¿podéis calcular el tiempo que destináis en reuniones, conversaciones, etc. que acaban sin decisión al considerar que no se tiene la información necesaria para tomarla? Podéis valorar también: ¿cuántas veces no se adoptan decisiones por cuestiones meramente subjetivas que después llevan a fracasos? Creedme, no os digo que pidáis que en vuestra empresa se analice al detalle y con el mejor de los rigores los datos antes de tomar una decisión y que se aprovechen para realizar un bonito trabajo que después deberá ser encuadernado. ¡No! No se trata de eso. Se trata simplemente de que pidáis a las personas que entran en vuestros despachos o reuniones que hayan pensado y analizado brevemente lo que os van a exponer o proponer, que traten de eliminar subjetividad.

En AICON, este mes hemos empezado con un ciclo de conferencias dedicado al Activity Based Costing (ABC) o Costes Basados en Actividades. Este sistema de cálculo de costes está revolucionando las empresas por su capacidad de suministrar información para mejorar la rentabilidad de la empresa y de valor a los clientes. La reflexión en la que se basa el sistema es que lo que origina los costes en las empresas son unas actividades que van orientadas a producir un servicio o producto para unos clientes. En la medida en la que seamos capaces de analizar nuestros costes en base a estas actividades seremos más precisos en imputar costes a clientes, productos, servicios, etc. y esto nos llevará a analizar mejor nuestros procesos, detectar actividades que no añaden valor y tomar decisiones estratégicas sobre productos, clientes, etc.

Animaos a conocer el ABC y el ABM (Activity Based Management). Os sorprenderá cuánto os permitirá objetivar vuestras decisiones y recordad la frase del título.

José María Llauger
Gerente y director técnico de Aicon Consultores de Gestión, S.L.
02/10/2007

sep 202007
 

No, no se han confundido. Esto es Infomanagement y, por lo tanto, estas líneas están dedicadas al mundo de la gestión de negocios. Ahora bien, estos días la reflexión con muchos colegas y empresarios ha sido la misma: ¡Empieza el nuevo curso!

Muchos de nosotros coincidimos en que los cursos empresariales se deberían establecer de septiembre a julio, dado que en agosto, al menos en España, la actividad se paraliza en muchos sectores.

¡Qué mejor momento pues para marcarse los objetivos del nuevo curso! Ahora bien, diferenciemos estos objetivos de los económicos, ya que seguramente todos veamos más procedente establecerlos de enero a diciembre.

Propongo establecer objetivos en términos de qué debemos aprender, qué cosas deberían cambiar en nuestra empresa, qué aspectos debemos mejorar, etc. orientados a la forma en la que hacemos las cosas, es decir, la forma en la que gestionamos, dirigimos, actuamos, ejecutamos, etc.

¡Decidid con qué materias vais a cargar la mochila y no os perdáis en el día a día porque en el mundo competitivo, los suspensos se pagan caros y repetir curso es muy costoso!

José María Llauger
Gerente y director técnico de Aicon Consultores de Gestión, S.L.
20/09/2007

jul 202007
 

En este último editorial antes del período vacacional os quería hacer reflexionar sobre una oportunidad que para muchas de vuestras empresas será nueva como disciplina, si bien aplicada en algunos casos: EL MARKETING INTERNO.

Tradicionalmente, la amplia disciplina del MARKETING se ha orientado al mercado de la empresa y, por lo tanto, a sus clientes; es decir, aquellos que adquieren algún servicio o producto a la misma. De hecho, hay quien define el Marketing como “conjunto de actividades destinadas a lograr, con beneficio, la satisfacción del consumidor mediante un producto o servicio”.

El otro día tuve la oportunidad de leer un artículo muy interesante que reflexionaba sobre las probabilidades de la empresa de satisfacer adecuadamente al cliente o consumidor si paralelamente no aseguraba la satisfacción de su personal.

Es por este motivo que en los últimos años se está insistiendo en el concepto y disciplina del MARKETING INTERNO. Este concepto se orienta a los clientes internos de la organización: los empleados. Éstos son los elementos básicos de la empresa y de su compromiso, motivación y satisfacción dependerá en buena parte la capacidad competitiva de la empresa y, por lo tanto, la capacidad de obtener beneficios y perdurar en el tiempo.

Por ello os propongo que reviséis hasta qué punto atendéis adecuadamente al cliente interno y, al igual que el cliente externo, buscáis fidelizarlo y obtener el máximo beneficio de él.

Para terminar, simplemente me gustaría desearos unas felices vacaciones, aprovechadlas para recargar baterías y disfrutar. Estaremos de nuevo de vuelta con nuestro Infomanagement a finales de septiembre.

José María Llauger
Gerente y director técnico de Aicon Consultores de Gestión, S.L.
20/07/2007

jun 202007
 

El pasado 14 de junio AICON participó en el primer fórum BARC que se celebró en España. Este foro citó a fabricantes de software, expertos y clientes interesados en Business Intelligence.

El Business Intelligence suele definirse como la transformación de datos de la empresa en conocimiento para generar una ventaja competitiva (Gartner Group). A menudo, en las compañías se dispone de muchos datos, pero éstos no constituyen realmente información debido a que no se pueden trabajar ni se estructuran de manera adecuada. Hoy en día, no dejamos de oír que estamos en la sociedad de la información; pero alerta, no hay que confundir información con datos.

En este foro presentamos una conferencia titulada ¿Cómo asegurar la eficiencia en sus procesos empresariales? En ella quisimos explicar cómo dos herramientas como el Balanced Scorecard (BSC) y el Activity Based Costing (ABC) nos pueden ayudar a mejorar la eficiencia, ya que se trata de unos métodos de gestión y análisis orientados a la consecución de los recursos con los menores recursos posibles (económicos, tiempo, etc.).

Finalmente, me gustaría reflexionar con vosotros sobre una de las barreras con la que me encuentro habitualmente en las empresas. Muchas veces se cree que la buena información es aquella que cuesta mucho obtener porque resulta complicada. En cambio, mi experiencia me dice que la mejor información acostumbra a ser muy fácil de conseguir y básica; la tenemos al alcance de la mano. Por tanto, la clave está en saber qué es lo que tenemos que controlar para alcanzar nuestros objetivos empresariales.

José María Llauger
Gerente y director técnico de Aicon Consultores de Gestión, S.L.
20/06/2006

may 202007
 

Este mes me gustaría utilizar estas líneas para recomendar un método lógico y de sentido común, pero ya sabéis a veces el sentido común es el menos común de los sentidos.

El método se iniciaría con una planificación. Debo señalar que muchas veces identifico en muchas empresas que existe una falta de establecimiento de objetivos a medio o largo plazo, incluso a corto. En otras ocasiones estos objetivos están marcados; ¿es esto planificación? Para mí no. Los objetivos son muy importantes, pero tanto o más que éstos lo es establecer unos planes de acciones que nos permitan marcar el camino a seguir para conseguirlos. Tendríamos que revisar si más bien no debiéramos considerar un objetivo que se cumple sin un plan de acciones como una extrapolación, pues en muchas ocasiones se consiguen simplemente con la inercia.

Si tenemos unos objetivos con unas acciones planificadas para conseguirlos podemos controlar cuantitavamente y cualitativamente su consecución. Es muy importante poner indicadores a un objetivo y, por qué no, a los hitos más importantes del plan de acciones.

Si controlamos, pero no revisamos los datos de los controles realizados, ¿no carece todo el proceso de sentido? La fase de revisión para mí es clave. ¿Quién acierta a la primera en los planes de acciones que definió, incluso en los objetivos que estableció? Revisar es lo que nos enriquece, pues nos hace aprender en qué hemos acertado y en qué hemos fallado para poder corregir y/o mejorar.

Por lo tanto, debemos tratar de marcar objetivos pero no olvidarnos de que éstos deben ir acompañados de PLANIFICACIÓN, CONTROL y REVISIÓN.

José María Llauger
Gerente y director técnico de Aicon Consultores de Gestión, S.L.
20/05/2007

abr 202007
 

En mi posición de liderazgo de AICON y de participación en proyectos de consultoría, no dejo que enfrentarme a las dificultades del cambio. En muchas ocasiones comparto con gerentes o empresarios la necesidad de que en sus empresas cambien algunas cosas. Ahora bien, muchas veces son estas personas las que después se muestran conformistas y son las principales barreras para el cambio. ¿No deberíamos empezar por entender que nosotros como personas también debemos vivir el cambio?

Los empresarios y gerentes debemos entender que parte de nuestra función es difundir el INCONFORMISMO dentro de la organización. Debemos procurar que todos en la empresa miren hacia los lados, vean la rapidez con que el mucho cambia y las oportunidades y amenazas que se nos plantean.

Indudablemente fomentar este INCONFORMISMO y, por lo tanto, promover una voluntad de cambio permanente no es la situación más cómoda. ¿Pero acaso buscamos únicamente comodidad? ¿No deberíamos también buscar ilusión y placer en nuestro trabajo, en nuestra vida y en la de nuestro personal? Pensemos qué puede pasar en nuestra empresa si no existe este sentimiento. No podrá producirse el cambio; en su lugar, habrá inmovilismo, falta de retos, falta de reacción, etc.

Reflexionemos sobre lo anterior y os recomiendo que lo hagáis después de entrar en el enlace que os proponemos ver y escuchar, el discurso de Steve Jobs, CEO de Apple. A alguien le puede parecer que no vale la pena escuchar las palabras de una persona que lidera una empresa muy grande, con mucha capacidad, que seguramente está de vuelta de todo y que es muy fácil decir determinadas cosas desde el éxito conseguido profesionalmente. Os aseguro que después de ver este vídeo sentiréis que habéis aprendido y os sentiréis deferentes. Quizá entonces podréis afrontar el INCONFORMISMO y el CAMBIO de una forma divertida y con una reforzada ilusión.

José María Llauger
Gerente y director técnico de Aicon Consultores de Gestión, S.L.
20/05/2007

mar 202007
 

En estas escuetas líneas me he planteado comentaros un tema que hace referencia al recurso principal y básico de la empresa, el que constituye la base de la pirámide: el equipo humano.

Un cliente hace poco me comentaba que un amigo empresario le había dicho que realmente confiaba que su empresa funcionase durante mucho tiempo, pero que no le preocupaba que esto no fuera así mientras que el equipo humano que le acompañaba en este proyecto no le abandonara. Decía que si su proyecto algún día fracasaba, estaba seguro de que con el personal del que disponía podría acometer otro con éxito.

¡Vaya comentario! Quizá parece hasta utópico, pero en verdad expresa mucho de lo que he expuesto en el primer párrafo. Estamos viendo en prensa y en nuestro entorno empresarial compañías que a menudo reinventan su negocio e incluso que cambian de negocio. La capacidad de las empresas para realizar estos cambios o adaptaciones está en el factor humano.

Ahora bien: ¿cómo dar respuesta al reto de tener un buen equipo? Recordad algunos ejemplos aquellos que os guste el deporte. Un buen equipo no está formado únicamente por grandes jugadores, con mucho talento, sino que tan, o más importante, es que estos estén bien dirigidos y que actúen como un conjunto.

Por lo tanto, ¡recordad que un buen líder es esencial para conformar y lograr que un equipo funcione!

José María Llauger
Gerente y director técnico de Aicon Consultores de Gestión, S.L.
20/03/2007

feb 202007
 

En AICON proseguimos con nuestras conferencias en diferentes organizaciones territoriales. En todas ellas hemos podido detectar el interés que despiertan los temas tratados entre los empresarios. La verdad es que más allá de diferentes sectores, con distinto grado de incidencia de ciertas problemáticas (mercados asiáticos, pérdida de competitividad, etc.), las oportunidades que acabamos discutiendo son, en general, las mismas.

En repetidas ocasiones hemos comentado con diferentes empresarios y directivos la necesidad que tienen las pequeñas y medianas empresas de marcarse unos objetivos a medio plazo e introducir en el día a día de los empleados acciones que vayan orientadas a la consecución de estos resultados. De lo contrario se puede observar que los trabajadores de nuestras empresas trabajan simplemente en el día a día con acciones que a menudo no van debidamente orientadas a construir el futuro.

Realmente este tema es importante. Revisad como trabajáis en la empresa; ¿qué porcentaje de tiempo dedicáis a trabajar en el día a día y qué porcentaje destináis a realizar acciones para conseguir objetivos futuros?

¡Los resultados actuales no garantizan los resultados futuros!

ene 202007
 

Hemos empezado un nuevo año cargados de grandes propósitos y nuevas ilusiones. Os propongo en estas fechas que anotéis estos propósitos para que el día a día no os los haga perder de vista. Este es el primer paso para empezar a planificarlos con unas metas temporales claras.

Asumid que tendréis que sacrificar cosas y seguramente pedir ayuda para emprender estos propósitos; ¡hacedlo! No os defraudéis a vosotros mismos, de lo contrario el año siguiente vuestras fuerzas se verán mermadas.

La satisfacción que os producirá llevar a cabo estas metas seguro que será la mejor de las recompensas. Si estos proyectos son empresariales, vuestro personal y vuestros colaboradores os lo agradecerán y, además, se verán reforzados si se deciden a seguir este mismo proceso.

Tranquilos, el día a día siempre está ahí, poderoso, absorbente, desafiante. Por lo tanto, decíos: ¡mañana todavía estará a ahí!, y proponeos empezar a afrontar hoy una de esas metas que os habéis propuesto.

Que tengáis un BUEN AÑO, lleno de propósitos hechos realidad.

José María Llauger
Gerente y director técnico de Aicon Consultores de Gestión, S.L.
20/01/2007