Espero que las vacaciones os hayan ido muy bien a todos los que las hayáis podido disfrutar. Es importante recargar fuerzas siempre en estos períodos pero sin duda especialmente este año.
Muchos de vosotros os habréis reincorporado y constataréis que no muchas cosas han cambiado. Las noticias siguen hablando de crisis. Nos bombardean con datos; la mayoría negativos, pero alguno positivo también hay. Las sensaciones varían según el sector, pero en general, nadie se atreve a pronunciarse de forma positiva y casi todos dudan sobre qué pasará.
Existe una gran incertidumbre, eso es cierto. Como también es cierto que si dudamos durante mucho tiempo y no tomamos decisiones es posible que la espera nos consuma.
He tenido la experiencia de empresas que han estado muy afectadas por la crisis y han tomado decisiones valientes, sin duda difíciles, algunas arriesgadas. Empezamos a ver cómo algunas de ellas están empezando a notar los resultados positivos de estas decisiones, que muchas veces han tenido que ir siendo revisadas.
La incertidumbre es cierta. Pero también es cierto que debemos ser capaces de gestionar y tomar decisiones en tiempos muy distintos a los anteriores. Ahora no podemos predecir claramente qué va a pasar. Sí podemos planificar acciones para intentar mejorar, controlar el resultado de estas acciones y revisar las decisiones para corregirlas.
Cuando estamos perdidos en medio de un camino podemos esperar que nos vengan a rescatar o empezar a andar, controlando el camino que seguimos y revisar si estamos en la dirección correcta. Desgraciadamente, empezar a andar no garantiza que logremos encontrar el camino, pero me resisto a confiar en que nos vengan a rescatar.
José María Llauger
Gerente de AICON Consultores de Gestión, S. L
Setiembre 2009